1. No pierden el tiempo autocompadeciéndose. “La autocompasión es el narcótico no-farmacéutico más destructivo; es adictivo, da placer momentáneo y separa a la víctima de la realidad.” John Gardner. Con esta cita empieza la autora el primer punto que las personas mentalmente fuerte NO hacen. Una persona con mente fuerte no piensa que la vida es injusta con ella, o se enfoca en contar las cosas negativas de su situación. Las personas mentalmente fuertes practican constantemente la GRATITUD, en sus palabras y en sus acciones como por ejemplo siendo amables, participando activamente, sonriendo, etc.
2. No regalan su poder. No permiten que cualquier crítica o comentario les afecte o los saque de sus casillas, no caen en provocaciones ni se enojan por motivos que no valen la pena. No guardan resentimiento si alguien los ofende y saben poner límites y ponerse metas de acuerdo a lo que ellos creen y no a lo que los demás piensan. Un buen consejo para no “regalar tu poder” a otros es replantear tu lenguaje. Piensa antes de reaccionar y escoge tus palabras. Ante un enojo o provocación respira, retírate y distráete. No dejes que todo tu día se amargue por algo que no vale la pena.
3. No evitan el cambio. A las personas débiles mentalmente les cuesta mucho generar un cambio y mantenerlo (adquirir un buen hábito) y por lo mismo lo evitan o crean excusas para no hacerlo. Las personas mentalmente fuerte se compartan como las personas que quieren llegar a ser y para lograrlo realizan los cambios necesarios aunque les cueste trabajo en un principio.
4. No se concentran en lo que no pueden controlar. Las personas con mente débil gastan mucha energía intentado que las personas a tu alrededor cambien o tratando de prevenir que algo malo suceda. No saben delegar ni pedir ayuda. En cambio las personas mentalmente fuerte se reconocen y se concentran en los que SI pueden controlar y procuran influir en las personas sin contralarlas. Reconocen que muchas veces lo único que pueden controlar es SU ACTITUD.
5. No se preocupan por complacer a los demás. “Preocúpate por lo que los demás piensen de ti y siempre serás su prisionero” - Lao Tse. Las personas mentalmente fuertes saben que no tienen que agradar a todo el mundo todo el tiempo y por lo tanto saben decir asertivamente “NO” y de ser necesario mantenerse firmes. Ponen en claro sus valores y se toman su tiempo para DECIDIR.
6. No temen arriesgarse. Aunque antes de tomar una decisión toman tiempo para analizar los riesgos y beneficios, no le temen al riesgo pues están bien informados de las posibles consecuencias. Saben que los resultados no son cuestión de suerte y no se les dificulta tomar decisiones importantes, por lo tanto no las aplazan.
7. No viven en el pasado. No se la pasan deseando que las cosas hubiesen sido diferentes, al recordar algo piensan en los HECHOS y no en las EMOCIONES. No están reviviendo constantemente malas experiencias o viviendo de glorias pasadas. Por el contrario, practican el autocontrol y mantienen su objetivo en el presente y futuro.
8. No repiten los mismos errores. Reconocen sus fallas y errores y esto les permite no volverlos a cometer. Intentan muchas soluciones posibles para no caer en lo mismo. Gracias a la experiencia que aprenden de cada situación de fracaso cada vez toman mejores decisiones
9. No les duele el éxito de los demás. Crean su propia definición de éxito y son capaces de apreciar y celebrar el éxito de los demás. Entienden que es mejor la COOPERACION que la COMPETENCIA. No sienten envidia si alguien los supera y les gusta escuchar historias de éxito. Ven el fracaso como un aprendizaje
10. No se rinden tras un fracaso. Ven el fracaso como un aprendizaje y por lo mismo no se dan por vencidos, aprovechan la oportunidad para crecer y mejorar. Son fuertes de voluntad.
11. No temen a la soledad. Disfrutan el silencio. Llevan un diario con sus emociones, meditan y disfrutan de sus pensamientos. Usan el tiempo para ser productivos. No dependen de la presencia de otros para sentirse bien.
12. No sienten que el mundo les debe algo. Buscan oportunidades basándose en sus propios méritos pues no sienten que otros deban cuidar o darles algo. No se creen lo suficientemente inteligentes para tener éxito sin esforzarse ni se consideran expertos en todo. Son humildes.
13. No esperan resultados inmediatos. Entienden que los cambios llevan tiempo. Tienen expectativas realistas y saben esperar.
Conclusión de la autora: “Desarrollar una mente fuerte significa saber que estarás bien sin importar lo que ocurra.”
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